... 4:26-27) quien comienza a destrozar y mutilar aquellas vidas hermosas que hace unos meses o años soñaban con la felicidad.
Alguien me dijo: «Mi hogar está en ruinas; hace diez años que no conozco la felicidad». Esta es la historia de miles y miles de hogares.
La Biblia dice que Satanás, el ladrón, viene para robar, matar y destruir (Juan 10:10). Esta es la delicia de Satanás: destruirte; y tú le haces el juego al no someterte a Cristo.
Jesús dice: «Si alguno de ustedes quiere ser mi seguidor, tiene que abandonar su propia manera de vivir, tomar su cruz cada día y seguirme». (Lucas 9:23 NTV). El Hijo de Dios apareció para deshacer las obras del diablo (1 Juan 3:8). No importa cuál sea el problema en tu hogar si tú y tu cónyuge, padres o hijos están dispuestos a someterse a Cristo hay esperanza para tu hogar.
Quizás haya familias enteras en las cuales hay rencor, odio y peleas; arrodíllense en este mismo instante y ríndanse a Jesucristo. Con Cristo hay armonía en el hogar; él es la fuente de poder.
¿Problemas? ¡Si, problemas siempre los hay! Jesús ya lo dijo en Juan 16:33: «En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo». Cristo da poder, sabiduría, paciencia y amor: todos sobrenaturales. ¡Qué ventaja poseen los que tienen a Cristo en el corazón!
Mi esposa y yo descubrimos día tras día la gran ventaja de tener a Cristo en nuestro corazón. Por otro lado, hemos conocido a muchas parejas que no tienen armonía, en las cuales hay tanta discordia familiar porque Cristo no los controla.
Yo te ruego en este momento que dejes tus excusas poéticas, retóricas y emocionales y que confieses con toda franqueza tu necesidad. Ven a Cristo ahora y ríndele tu corazón y tu hogar.
Para la juventud: ¡vengan a Cristo! A Cristo hay que recibirlo por la fe.
Él perdona el pasado. Él entra en el corazón, en el hogar y hasta en la sociedad para bendecir y llenar de alegría, armonía y paz.
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