... la diosa luna. Las brujas y los satanistas son, por supuesto, una pequeña minoría. Pocas personas que celebran Halloween hoy en día alguna vez piensan en la oscuridad que sobrecoge a la mayoría de las prácticas del Halloween.
Una alegre niña disfrazada con un sombrero negro de punta y su respectiva vestimenta, difícilmente piensas en la muerte o en los espíritus de los difuntos. Ella piensa en dulces y diversión. Ella está entusiasmada con su disfraz especial. Y espera con ansias el peregrinaje casa por casa.
Los comerciantes también se anticipan al 31 de octubre, la venta de dulces,
disfraces, decoraciones y golosinas para fiestas hacen al Halloween una de las temporadas con mayores ventas en el año.
El apóstol San Pablo escribió: "Todo me es lícito" . El se refería en esa ocasión a la libertad que tenemos de comer, inclusive lo sacrificado a los ídolos, ya que después de todo, los poderes sobrenaturales que se pretenden desatar en la celebración no tienen potestad sobre aquellos que pertenecen a Cristo. Pero a continuación de esa frase Pablo añade otra: "todo me es lícito mas no todo me conviene." (1 Cor. 8.9). Por tanto es a la luz de esto que los cristianos necesitan examinar cómo celebran el Halloween.
LO QUE PUEDE NO LASTIMARLE A USTED, PUEDE LASTIMAR A OTROS
Pablo dijo que no dañaría a un cristiano comer carne sacrificada a los ídolos. Después de todo los dioses paganos a los que se les había sacrificado no eran dioses reales. En la misma luz, él probablemente diría que a los cristianos no se les prohíbe disfrazarse, o ir de trato o truco o asistir a fiestas de Halloween.
Después de todo, "sabemos que un ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un Dios" (1 Corintios 8.9). Pero nos amonestó a que nuestra libertad "no venga a ser tropezadero para los débiles". Durante el Halloween los niños en particular son los débiles. Podríamos estar abriendo a nuestros hijos a las influencias del ocultismo. Además los cristianos nos encontramos eternamente en las manos del Señor, pero eso no es verdad en la mayoría de las personas a nuestro alrededor. Nosotros que hemos encontrado la vida en Jesús, deberíamos tener cuidado que nuestra libertad no impida a otros encontrar la misma vida eterna.
LO QUE DICE LA PALABRA DE DIOS
La Biblia nos alienta siempre a tener "puestos los ojos en Jesús". En esa noche del año, la mayoría de los ojos no están puestos ...