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El consejero bíblico


¿Exaltar el dolor? ¿Ignorarlo? parte 3 / Continuación

... notable. A esta altura el que sufre comienza a ver que en Dios se puede confiar.
Ideas prácticas
a) Satanás está al acecho; su engaño consiste en hacer creer a la gente que Dios no es bueno. Lea Génesis 3. ¿Cuál es la estrategia de Satanás? ¿Ve usted esa estrategia en su vida? ¿Cómo podría combatir usted a Satanás?
b) Lea los Salmos donde Jesús habla sobre su propio sufrimiento.
c) ¿En qué aspecto de su vida usted declara: ?Tengo derecho a menos dolor y menos sufrimiento??
d) Lea Isaías 1. Note la preocupación prominente de Dios en cuanto a la justicia y su ira por la injusticia.

4. Dios dice: ?Debes saber que Yo soy Dios?.
Para solidificar este punto de atención externo, para que el sufrimiento no parezca tan agobiante, Dios nos conforta con el hecho de que el mundo no está en estado caótico. Él es el Dios soberano que reina. Ni el sufrimiento ni Satanás están por encima de Dios.
Es justamente aquí que muchas teologías del sufrimiento fracasan. Para ellas Dios es un Dios de amor compasivo, pero no pueden conjugar eso al hecho de que Dios es todopoderoso. Dicen que no puede ser ambas cosas.
La respuesta bíblica, por supuesto, es que Dios afirma las dos cosas: Él es amor, y Él es el Dios soberano sobre toda la creación. Esto no hace a Dios autor del pecado ni del sufrimiento; lo coloca por encima de ellos, haciendo que todas las cosas obren para la gloria de Dios. José indica que los planes de Dios fueron superiores que la maldad de sus hermanos (Gn.50:20). Jeremías, alguien que sufrió en forma consumada, dice: ?¿Quién puede decir que algo sucede sin que Dios lo mande? ¿Acaso no suceden de la boca del Altísimo los bienes y los males?? (Lm.3:37,38). En medio de su persecución el salmista encuentra descanso sólo en Dios, y tiene confianza: ?... de Dios es el poder, y tuya, Señor, es la misericordia...? (Sal.62:11-12).
Por último, todas las preguntas de Job fueron contestadas, o al menos consideradas insignificantes, en una conversación unilateral donde Dios esencialmente dijo: ?Debes saber que Yo soy Dios? (Job 38-41). El abrumador peso de la gloria de Dios hizo que el sufrimiento de Job pareciera menor. Cuando Job estaba languidenciendo con la pregunta ?¿por qué a mí??, y en realidad estaba preparando un tribunal terrenal para cuestionar al Altísimo, Dios sorprendió a Job con un tribunal donde Él mismo fue el fiscal. ?¿Es sabiduría contender con el Omnipotente? ¡Responda a esto el que disputa con Dios!? ...

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