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El consejero bíblico


Ayuda para bulímicos parte 2 / Continuación

... persona no depende de la abundancia de sus bienes». Jesús nos hace advertencias sobre algo porque existe una gran posibilidad de que seamos engañados por eso. Él continúa diciendo: «Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán?. La vida tiene más valor que la comida?. Así que no se afanen por lo que han de comer o beber; dejen de atormentarse». Note cómo el Señor vincula la preocupación y el desenfreno con la comida y la bebida. Nótese también Lucas 21:34: «Tengan cuidado, no sea que se les endurezca el corazón por el vicio, la embriaguez y las preocupaciones de esta vida». La preocupación es resultado de confiar en uno mismo, y se debe tratar en el contexto de estos hábitos de codicia. El apóstol Pablo habla de la codicia en Colosenses 3:5 (RVR 1960), afirmando que es idolatría y es parte de la vieja naturaleza que debemos considerar muerta. Y como sucede con cualquier tipo de idolatría, lo que comienza como una agradable excursión, se convierte en una trampa esclavizante, una «tumba de codicia». Como consejero, es útil que usted utilice la expresión «hábitos codiciosos» en vez del término «compulsiones».

2. Orgullo y deseo equivocado de perfección superficial: el fariseo en el corazón.
En la persona bulímica se da una combinación mala y mortal de motivos interiores. Además de esos abrumadores hábitos de codicia, ansiedad y desenfreno, hay fuertes deseos de aparentar que uno tiene control de la situación y de que hay belleza exterior. Las consecuencias naturales del hábito de los atracones es aumento de peso e incomodidad. La mujer bulímica no está dispuesta a pagar el precio de sus desenfrenos con la comida. Ella se esconde, no es sincera, y evade la culpa a fin de evitar el resultante aumento de peso. De manera que expele la comida. Puede hacerlo con el uso de laxantes o con vómitos autoinducidos. Incluso tal vez haga ayuno durante varios días para compensar el atracón. La cuestión es que ella está evitando la verdad y la realidad de su desenfreno.

Mateo 23 habla bastante sobre vivir para la apariencia exterior. En este capítulo Jesús confronta a los fariseos y a los escribas por su hipocresía y su orgullo. «Todo lo hacen para que la gente los vea»; «limpian el exterior del vaso y del plato, pero por dentro están llenos de robo y de desenfreno»; y «Así también ustedes, dan la impresión de ser justos pero por dentro están llenos de hipocresía y maldad». El Señor habla muy claramente a nuestro corazón. A menos que ...

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