Artículos

El consejero bíblico


Los mitos del sexo / Continuación

... se jacten de su pureza, recordando que el verdadero amor nace de un corazón puro (1 Timoteo 1:5).

MITO N 3: «El sexo pre-matrimonial es natural y saludable, por lo tanto, no tiene consecuencias». Es un tema que bien podría llenar un libro, pero menciono sólo en forma de bosquejo que «todo lo que el hombre sembrare, eso también segará» (Gálatas 6:7).

El sexo fuera de los votos matrimoniales:
? Crea problemas sexuales dentro de un futuro matrimonio.
? Fomenta falta de confianza en la pareja en la mente de las personas que cometen el acto (2 Samuel 13).
? Facilita la posibilidad de algo que estamos viendo con más y más frecuencia, «una adicción sexual».
? Siempre existe el temor al embarazo.
? El contexto (tanto físico como emocional) en que generalmente se practica el sexo antes del matrimonio, lejos está de ser el ambiente de amor y ternura del sexo matrimonial. Por lo tanto, distorsiona el concepto de que es o puede ser el sexo como Dios lo diseñó.
? Hoy día hay que agregar las enfermedades transmitidas por el sexo impuro.

? Cuando los novios empiezan a tener relaciones sexuales o aun caricias profundas, el muchacho suele perder el aprecio por la personalidad de su novia y aquellas cualidades internas que perduran, y concentra su atención (quiérase o no) en el cuerpo y en el sexo. La mejor manera de imposibilitar la intimidad emocional de una pareja es comenzar con la intimidad física antes del matrimonio. La Biblia afirma que no es bueno que el hombre esté solo (Génesis 2:18). El Creador le dio una mujer por compañera (Malaquías 2:14). Algunos propósitos del matrimonio son el compañerismo, la comunión y la intimidad a fin de crear «una sola carne» (Génesis 2:24). Tal intimidad es una necesidad y el ser humano la busca porque le hace falta, pero lamentablemente muchos no la encuentran. En esta búsqueda de intimidad, por lo general el varón busca relaciones físicas antes de las emocionales. Por su parte, la mujer desea tener intimidad emocional antes de entregarse físicamente. Cuando el varón--por lo general es el muchacho, no la chica, quien apresura el contacto físico--acelera los roces y las caricias en el noviazgo, la muchacha acelera la búsqueda de la intimidad emocional. Esta intimidad emocional se hallará muy pocas veces una vez que hayan precipitado el contacto físico.
? «Honroso sea en todos el matrimonio, y el lecho sin mancilla; pero a los fornicarios y a los adúlteros ...

Continuar leyendo